jueves, 6 de marzo de 2014

¿Eres tú una "persona amarilla?"

Antes de terminar el año, tuve la oportunidad de conocer “un poquito más”, que no demasiado, a una estupenda mujer, quien sorprendentemente me nombro como “persona amarilla”

Al principio de nuestra conversación me resulto chocante la acepción, dado que no supe entender demasiado bien, que me quería decir.

Me lo explico muy sencillamente haciéndome alusión a la persona de Albert Espinosa y a su libro (que recomiendo) , en el que hace referencia a esta cualificación.

Las personas amarillas, son personas que sin ser exactamente familiares, amantes, o amigos se cruzan en tu vida, y en una sola conversación o encuentro, te la pueden llegar a cambiar.

Eres consciente de que te cambian la vida. Sin saber cómo, sabes que tu encuentro con ellas va a dejar huella en ti.

Y es que es muy probable que pasen por tu vida y desaparezcan para siempre. Sin embargo, hay algo de su energía, de su poder y de su magia, en tu persona. Te han dejado su estela sin necesidad de una conexión intensa o larga en el tiempo.

Desde aquí, quisiera dar las gracias a todas esas “personas amarillas” que como estrellas fugaces, han pasado por el cielo de mi vida.

Darles las gracias por todo lo que me aportaron, por el apoyo y la sabiduría que me hicieron llegar, por estar ahí cuando las necesitaba y sobre todo, por haberme ofrecido tanto, a cambio de tan poco.
Yo ahora pertenezco al club de las personas amarillas. ¿Te apuntas?
¿Qué tal? ¿Bien? o ¿mejor?